Hiram Barrios: "El aforismo es una suerte de épica posmoderna"


El Aforista entrevista a Hiram Barrios, a propósito del boom aforístico que está experimentando España en los últimos años. Barrios (nacido en 1983) es escritor, traductor y catedrático. Estudió Letras en la UNAM y es especialista en Literatura Mexicana por la UAM. Ha publicado cuentos, poemas, ensayos y traducciones para distintas revistas, periódicos y suplementos culturales de circulación nacional. Textos suyos han aparecido en revistas de Colombia, Venezuela, Argentina y España. Ha traducido al español a Edoardo Sanguineti, Roberso Roversi, Donato di Poce y Fabrizio Caramagna. Preparó la antología bilingüe Voces paranoicas de Eros Alesi (2013). Es autor de los libros El monstruo y otras mariposas (ensayo, 2013) y Apócrifo (aforismo, 2014). Como experto estudioso del aforismo, también es responsable de la antología de autores mexicanos titulada Lapidario (2015). Es profesor de arte y literatura en el Tecnológico de Monterrey, Campus Estado de México.

Como observador privilegiado y ecuánime del reciente “boom” aforístico español, ¿qué opinión le merece el fenómeno? ¿A qué lo atribuye?

- Expectación. No deja de sorprenderme la cantidad de autores y de obras que se han dado a conocer en los últimos años. Mucho se ha especulado sobre el papel de las nuevas tecnologías, y se afirma que han posibilitado cierto gusto por la creación y la degustación de la literatura breve; sin embargo, considero que el despunte de la aforística es un fenómeno finisecular que se puede rastrear en distintas tradiciones europeas. Internet y los servicios de microblogging (la llamada tuiteratura, por ejemplo) serían apenas la punta del iceberg. Que dicho despunte sea mucho más visible en España es innegable, y a tal grado que no es posible el parangón con otras tradiciones.

Me inclino a suponer que una de las razones que han motivado este boom se debe a un cambio en los protocolos de lectura, aunque se trata de un suceso multifactorial. Desde finales del siglo XIX se atisba que la brevedad adquiere presencia como principio creador, y a lo largo del siglo pasado se instaura paulatinamente como ideal estético. Tras el boom hispanoamericano, en el que predominó el discurso totalizador y la novela de largo aliento, deviene un nuevo boom en la literatura hispánica, uno que privilegia el discurso fragmentario, breve, conciso, intertextual y figurativo: en España, el aforismo; en Hispanoamérica, la minificción o el microrrelato.

El aforismo sería una suerte de épica posmoderna: encarna la evolución de dos tradiciones encontradas: la aforística y la poesía contemporánea. Quizá ha adquirido una presencia inusitada porque se ajusta al estilo de vida vertiginoso que ha signado este ahora.

¿Qué autores le resultan más atractivos, de los que ha tenido la oportunidad de conocer?

- El problema es que hay muchos aforistas, y de sobrada calidad. Personalmente, me agrada la orientación poética que imprimen autores como Miguel Ángel Arcas, Carlos Marzal o Lorenzo Oliván; la elucubración filosófica-ensayística, a veces de corte moral, en la pluma de Manuel Neila o de Vicente Verdú; la sugerencia de Luis Felipe Comendador o el poder evocativo de José Luis Morante o de Érika Martínez; el juego con la estructura y la organización del corpus que pone en marcha Fernando Menéndez en Los sueños de las sombras (2016); el humorismo y el ingenio de Ramón Eder, la picardía de Juan Manuel Uría o la lucidez de Azahara Alonso son asimismo algunas de las cualidades que celebro. Sería injusto no mencionar a Dionisia García, Rafael Argullol, Carmen Canet, León Molina, Felix Trull o Javier Sánchez Menéndez, autores que he leído, e incluso a algunos he reseñado, y cuya propuesta me parece digna de ser ponderada. Podría enlistar otra docena de aforistas, pero con los ya mencionados es suficiente para apuntar mi panorama personal de la escritura aforística en España.

¿Cuál es su opinión de las numerosas (cinco) antologías de aforistas españoles vivos que se han publicado en los últimos años en nuestro país?

- Según mis cuentas, en España se han publicado siete antologías recientemente: Pensar por lo breve (2013), Aforistas españoles vivos (2015), Aforismos constantes y sonantes (2016), Bajo el signo de Atenea (2017), Verdad y media (2018) —y su versión reducida: Verdad y media: 300 aforismos— y Fuego de palabras (2018). Me parece que han cumplido una doble función: en primer lugar, de rescate y de recuperación de una tradición semioculta y marginal; en segundo lugar, de sensibilización, pues han logrado despertar el interés del público lector. Pero juzgo innecesario continuar compilando el aforismo español contemporáneo. Quien someta a escrutinio los índices de los títulos mencionados encontrará una tara: se repiten los autores, ya sea en calidad de inclusión o de exclusión. Además, se corre el riesgo que ya se ha visto en Hispanoamérica con las antologías de minificción: han surgido de pronto una infinidad de compendios regidos por la ley del menor esfuerzo, antologías que repiten hasta el hartazgo los mismos nombres y los mismos textos. Ojalá no suceda eso. En todo caso, sería más interesante antologar el aforismo escrito en otras lenguas o, mejor aún, el otro aforismo escrito en español: hay en Hispanoamérica una tradición inexplorada que cuenta con exponentes como José Martí, Macedonio Fernández, Antonio Porchia, Octavio Paz, Nicolás Gómez Dávila, y un largo etc. Un terreno desconocido y que podría arrojar muchas luces en torno al aforismo escrito en nuestra lengua. En la actualidad, sólo España y México cuentan con censos aforísticos.

¿Cree que el aforismo continúa siendo menospreciado por la crítica literaria convencional, como si fuese un género menor o de poca monta?

- Por supuesto. Y no creo que sea posible cambiar esa percepción fácilmente. El aforismo, como el arte conceptual, demanda un lector capaz de “descifrar” un texto que no siempre responde a convenciones o expectativas esperadas. Y, como en el arte conceptual, se presta para la impostura o la falsificación. Escribir aforismos no es una tarea sencilla, e incluso entre los más avezados es común hallar obviedades, lugares comunes, sinsentidos o la “greguería fácil” que contribuye a ver el aforismo como un juego, una apuesta menor o de poca monta. No será fácil cambiar ese paradigma.

¿Qué direcciones cree que dibuja el aforismo español actual, y cuáles cree que tienen más bazas de perdurar en el futuro?

Encuentro cuatro tendencias que se entrecruzan y se cuestionan constantemente: el aforismo poético, de corte analógico y figurativo; el aforismo filosófico, que manifiesta una preocupación cognitiva o incluso cognoscitiva; el aforismo moral o ético, de corte didáctico o ensayístico; y el aforismo que busca el humor o el ingenio, cuyo lenguaje siempre es festivo. Y considero que la vertiente poética es la que augura un mayor crecimiento y aceptación en un futuro cercano.







Enciclopedia de libros españoles de aforismos

Inauguramos nueva sección, en la que vamos a empezar a recopilar los mejores aforismos de los libros escritos por autores nacidos o residentes en España, y publicados en nuestro país a partir del año 2010 en adelante. Lo hacemos para reunir en un único espacio virtual la más ingente cantidad de información posible sobre este tema, a modo de "enciclopedia" para su consulta por parte de cualquier interesado o estudioso en el futuro. Las primera obras que incorporamos son los libros de Carlos Marzal, Ana Pérez Cañamares, Jordi Doce, Dionisia García, Fernando Menéndez, Erika Martínez, José Antonio Santano, Emilio López Medina y Mario Pérez Antolín.


Pessoa: aprender a no ser nadie

La obra y la personalidad de Fernando Pessoa han sido sobradamente estudiadas, analizadas e incluso desmenuzadas desde que, en 1982, se diera a conocer uno de los títulos mayúsculos del siglo XX, su proteico y deforme Libro del desasosiego. La pluralidad y heterogeneidad del autor eran, no sólo conocidas, sino fomentadas por él mismo, así que sería ocioso abundar de nuevo en ello. Aun así, tal vez se haya incidido excesivamente en su gusto por los heterónimos desde la perspectiva de la multiplicación de la identidad personal, orillando el hecho de que, detrás de ella, late un proyecto de destrucción de la misma, una verdadera tarea de conquista del anonimato esencial del ser humano.


Gil-Albert: el placer de discurrir

Un arte de vivir es un volumen misceláneo, compuesto por anotaciones dispersas entre las cuales los aforismos tienen un papel destacado, donde Juan Gil-Albert (Alcoi, 1904-Valencia, 1994) "escribe, como si se tratara de un dietario personal", en palabras de Claudia Simón, aquellas reflexiones en bruto que luego darían pie, o no, a algunos de sus poemas, ensayos o artículos de prensa. Ese carácter primario, un tanto visceral, nos permite acceder a la intimidad del escritor desde una perspectiva nueva, la cual ya habíamos avizorado en su Breviarium vitae. Son sus disquisiciones, aun inspiradas en la España de su época, de total actualidad, plenamente vigentes, lo cual nos informa, para nuestro espanto, de lo poco que cambian algunas naciones por mucho que muden sus estructuras políticas, y para nuestro consuelo, de lo mucho que perviven los buenos textos cuando apuntan a lo esencial.


Los sofismas de Vicente Núñez

Vicente Núñez (Aguilar de la Frontera, Córdoba, 1926 - 2002) empezó a publicar sus peculiares 'sofismas' en octubre de 1987, y siguió haciéndolo prácticamente hasta su muerte en las páginas de los periódicos Córdoba y El Correo de Andalucía. Según indica Miguel Casado, "se trata de tiradas breves, que recogen en cada caso ocho o diez frases, sin una especial ordenación ni alguna clase de afinidad temática". Estos sofismas se recogieron en volumen en varias ocasiones: Sofisma (1994), Entimema (1997) o Sorites (2000). El propio Casado publicó la antología Nuevos sofismas (Germania, Alzira, 2001), en la cual agrupaba los aforismos por temas, a modo de diccionario extravagante; con ello muchas de las anotaciones se iluminaban entre sí, logrando una apariencia sistemática que tal vez no había buscado conscientemente el autor (lo cual no significa que no existiera). En El Aforista compartimos algunos de los aforismos de este libro que más nos han llamado la atención.


Karl Kraus: el artista es el Otro

En palabras del filósofo y aforista Miguel Catalán, "de la síntesis entre lo ético estético procede la importancia del aforismo que, a partir de 1905, irá dominando toda la escritura del austríaco Karl Kraus (28 de abril de 1874 - 12 de junio de 1936), pero que constituye también la forma secreta de toda su escritura. Canetti lo expresa indicando que en sus libros y discursos nunca existió un principio organizador dominante, sino que las frases aisladas (inatacables, perfectas) iban ensamblando, el modo de sillares, una Muralla China igualmente eficaz en todas sus partes. Quintaesencia de su estilo y de un ideario personal que intentaba unificar fondo y forma, el aforismo de Kraus presenta una densidad excepcional y unas aristas cortantes, cualidades que tanto influirían en el estilo de escritura de Ludwig Wittgenstein, Elias Canetti, Thomas Bernhard o Peter Handke". El Aforista publica una breve selección de los aforismos de Karl Kraus, extraídos de La tarea del artista (Casimiro, Madrid, 2011), con la pertinente autorización de su traductor y antólogo, el propio Catalán, a quien agradecemos su generosidad.


María Zambrano: la entraña del cielo

En el libro titulado Dictados y sentencias (Edhasa, Barcelona, 1999), Antoni Marí realizó una selección de frases entresacadas de las obras de María Zambrano, tal vez la autora más densa, honda y audaz del pensamiento español de todos los tiempos. La exigencia de claridad que la propia Zambrano planteaba como horizonte moral y conceptual de la filosofía se traduce en un estilo con sobreabundancia de expresiones rotundas, apodícticas, válidas por sí mismas aunque deudoras de una cosmovisión que las ilumina y dignifica. Es por ello que la operación desnaturalizadora de Marí, y en general de todas las antologías que destilan aforismos a partir de textos de otra naturaleza, encuentra en este caso una plena justificación, tanto filosófica como poética.