Pérez Antolín: los prodigios de la planicie


Nacido en Backnang (Alemania), Mario Pérez Antolín reside en la actualidad en Ávila. Licenciado en Geografía por la Universidad de Valladolid y especialista en ordenación del territorio, planeamiento urbano y política ambiental, fue Técnico Superior de Estadística y Estudios Agrarios de la Junta de Castilla y León. Ha coordinado proyectos de cooperación internacional e impartido conferencias y seminarios en Centroamérica y África. Pérez Antolín es uno de los responsables del resurgir del género aforístico en España durante los últimos años. Eugenio Trías dijo de su libro Profanación del poder: "Está lleno de chispazos de inteligencia y sabiduría que acreditan el oficio del que escribe. He disfrutado leyendo estas páginas. Cuando se comienzan es difícil desprenderse de ellas". Victoria Camps dijo de su libro La más cruel de las certezas: "Entre la filosofía y la poesía, Pérez Antolín muestra con su escritura que el pensamiento es capaz de emocionar al dejar de ser ese discurso árido que sólo sabe enlazar abstracciones y nos distancia del mundo".

Publicamos un avance del próximo libro de Pérez Antolín, donde ahonda en su cultivo del fragmento como género mixto, entre el apunte y el aforismo, la nota de dietario y la reflexión ensimismada, en el cual se está revelando como un maestro consumado en el idioma español.



Harto de llegar siempre tardes a sus citas, ha decidido corregirse y ser puntual a partir de ahora. Por más que lo intenta, no consigue adaptarse al ritmo de los otros. Cuando no se rezaga, se tropieza; y si no, son los despistes los que le impiden comparecer a tiempo. Antes de que un decreto de precisión acabe con su derecho a la demora, piensa destruir todos los relojes que hay sobre la faz de la tierra o, al menos, manipularlos para que retrasen al unísono.



Las balas, en vez de entrar, salen de su pecho. Se introducen en los cañones de unos fusiles que vuelven a descansar en los hombros de unos soldados en formación. La sangre del fusilado desaparece y este recupera su posición erguida. El oficial envaina su sable y, caminando hacia atrás, monta en el vehículo que lo trajo. Todos retroceden y se van, sin dar la espalda, por donde vinieron. El sol hace un recorrido inverso. La muerte, esta vez, no se ha salido con la suya porque alguien decidió rebobinar la escena.



Hojas lobuladas, que parecen de cuero, sobre briznas de hierba, que parecen, por el rocío, los filamentos de una pradera submarina, frente a cantos de granito, que parecen huevos de dinosaurio, en un valle, que parece una bañera inmensa, a los pies de una  montaña, esta sí, incomparable a nada.



Me identifico con las cosas que carecen de objeto y con los hombres que no tienen propósito y con los transeúntes sin destino y con los seres que perdieron su función y con aquellos que han hecho de la inercia su no-finalidad.



Este viento que me ocupa no llena el lugar que deja; se conforma con rizarse y envolverse y plegarse, así hasta que la nervadura de un soliloquio admite su silencio abrumador. Por encima de lo inalcanzable, ni el ímpetu más quebradizo logra la condición de claridad absorta; antes debe almacenar vacíos, configurar aberturas, convalecer de su propia nada, implorar un reducto mínimo donde seguir ardiendo… Prodigios tan convencionales como la planicie que ya no sostiene elevaciones porque disfruta de su completo arrasamiento.






Pessoa: aprender a no ser nadie

La obra y la personalidad de Fernando Pessoa han sido sobradamente estudiadas, analizadas e incluso desmenuzadas desde que, en 1982, se diera a conocer uno de los títulos mayúsculos del siglo XX, su proteico y deforme Libro del desasosiego. La pluralidad y heterogeneidad del autor eran, no sólo conocidas, sino fomentadas por él mismo, así que sería ocioso abundar de nuevo en ello. Aun así, tal vez se haya incidido excesivamente en su gusto por los heterónimos desde la perspectiva de la multiplicación de la identidad personal, orillando el hecho de que, detrás de ella, late un proyecto de destrucción de la misma, una verdadera tarea de conquista del anonimato esencial del ser humano.


Wittgenstein: reflexiones que siembran

Ludwig Wittgenstein nació en Viena el 26 de abril de 1889 en el seno de de una de las familias más prominentes y ricas del Imperio austrohúngaro. Creció en un hogar que proporcionaba un ambiente excepcionalmente intenso para la realización artística e intelectual. Es uno de los filósofos más relevantes del s. XX, gracias a su Tractatus logico-philosophicus. Mantuvo una posición muy crítica sobre sus colegas e incluso sobre lo que podían opinar de él otras figuras del ámbito científico. Murió en Cambridge en 1951, mientras se encontraba trabajando en un manuscrito que analizaba los supuestos y condiciones de la certeza, publicado de manera póstuma. Los aforismos que publicamos pertenecen a su obra Cultura y valor.


Geyser Dacosta: imponerse límites

Geyser Dacosta nació en Caracas, en el año 1980. Acaba de publicar su primer libro de aforismos, Acus (Libros al Albur, Sevilla, 2017). Fue finalista del certamen poético Alfonsina Storni (Calgary, 2009). El mismo año fue galardonado con el premio de autores inéditos de Monte Ávila Editores, mención narrativa, por su obra Los hijos de Israel. En 2016 obtuvo el X Premio Nacional de Cuento Policlínica. Sus textos y algunas críticas sobre su poesía han aparecido en diversas revistas literarias, entre otras: Ágora; papeles dramáticos, Alba Volante, Almiar, Vallejo & Co, Qantati. Actualmente vive en Montreal.


Del fragmento al diálogo: 
los aforismos de Roberto Juarroz

La deplorable fragmentación o división del pensamiento en campos aislados de poesía y filosofía, según la “historia no narrable” planteada por Roberto Juarroz, implica de igual manera una separación de la materia con respecto al concepto y del cuerpo con respecto a la idea. Los términos elegidos por Juarroz en sus propios aforismos parecen resumir un afán de reconciliación entre ambos universos alejados. La más congruente y sólida obra en prosa de Juarroz es la suma de sus Fragmentos verticales, ordenados por el propio autor en tres grupos: “Casi poesía”, “Casi razón” y “Casi ficción”.  A decir verdad, las conferencias, entrevistas y ensayos de Juarroz pueden leerse también como sucesiones de aforismos o declaraciones redondas que se comunican entre sí, complementándose y a veces, en apariencia, contradiciéndose.


Los recatados aforismos 
de Victoria León

Victoria León es traductora literaria profesional y vive en Sevilla. En breve aparecerá su primer libro de aforismos, Insomnios. Son los suyos unos aforismos delicados, recatados, casi pudorosos, que emanan directamente de ese ámbito ambiguo en el que compiten, pacíficamente, la reflexión y la emoción, el sentimiento y el pensamiento. El Aforista presenta una selección realizada por la autora, a la que agradecemos su amabilidad y gentileza.


Los artilugios de Sánchez Menéndez

Javier Sánchez Menéndez nació en Puerto Real (Cádiz) en 1964. Cursó estudios de Historia General, Filología y Filosofía en la Universidad de Sevilla. Entre los años 2004 y 2012 ha sido el Presidente de la Fundación ECOEM. Creó en 2009 la editorial Ediciones de la Isla de Siltolá, sello que ha apostado por dar difusión a la creación poética española e hispanoamericana. El autor cultiva la prosa poética, el ensayo de reflexión metafísica que publica diariamente en su blog, La vida al filo de la espada, donde también desgrana su poética. Actualmente reside en Sevilla. El Aforista presenta una selección de los Artilugios de Sánchez Menéndez, seleccionados por el propio autor.


Ana Pérez Cañamares y la belleza de estar vivos

Ana Pérez Cañamares nació en Santa Cruz de Tenerife, en 1968, y vive en Madrid. Ha publicado los poemarios La alambrada de mi boca (Baile del Sol), Alfabeto de cicatrices (Baile del Sol), Entre paréntesis. Casi cien haikus (La Baragaña), Las sumas y los restos (Premio Blas de Otero-Villa de Bilbao 2012), Economía de guerra (Lupercalia), De regreso a nosotros (Ya lo dijo Casimiro Parker); el libro de aforismos Ley de conservación del momento (Isla de Siltolá) y el libro de relatos En días idénticos a nubes (Baile del Sol). Este año aparecerá el libro de poemas El espejo discreto, con el que ganó el premio Vicente Núñez-Diputación de Córdoba 2016. Participa con asiduidad en recitales y festivales de poesía, y sus poemas están recogidos en numerosas antologías. Algunos de ellos han sido traducidos al inglés, griego, polaco, croata y portugués. Los aforismos que publicamos han sido seleccionados por la propio autora para la ocasión.


Nicolás Gómez Dávila: Dudar de la duda

Según David Carril, "nuestro autor no tiene dudas al respecto: la modernidad la inventó el mismísimo Diablo. Toda su obra surge como reacción a esa modernidad ilustrada y progresista, demócrata y niveladora, aburrida en el arte y fea en la moral: Más que la inmoralidad del mundo actual, es su fealdad creciente la que invita a soñar en un claustro. Como decíamos, la obra de Dávila no es impermeable a los complejos senderos de la modernidad y sus secuelas contemporáneas. No por casualidad no es la suya una obra destilada en grandes manuales escolásticos, sino que está impregnada del espíritu que desde Chamfort hasta Nietzsche hace confiar en el aforismo y el fragmento como promesa de una razón que pretende saltar por encima de las tediosas mediaciones de la argumentación y el pensamiento “claro y distinto” que propugnaba ya Descartes. Los aforismos que presentamos han sido extraídos de su libro fundamental (y monumental, por su extensión y también por su ambición) Escolios a un texto implícito.



Camón Aznar: las lecciones del mar

Aforismos del solitario es un libro honesto, aquilatado, variadísimo en temáticas y tonos, profundo sin caer en el amaneramiento, aunque sí se pueden detectar algunos estilemas característicos de cierta tradición humanista española; por ejemplo, se muestra proclive a la afirmación rotunda e incluso campanuda, lejos de la ligereza de un Jardiel Poncela en sus Máximas mínimas o la cosmopolita ironía de Ramón y Cajal en sus Charlas de café. Se echa de menos cierta ironía, pero es que el autor no está para bromas: sus referentes son los grandes autores de la literatura sapiencial (Séneca, Montaigne, Gracián) y su meta, hacer confluir el mayor número de ejes apuntando hacia el horizonte reflexivo que pone en marcha su reflexión: la muerte, la tragedia, Dios y el diablo, el conocimiento y sus límites, el arte y sobre todo la(s) religion(es) son sus polos de atracción, a los cuales acude pertrechado de sobrado bagaje conceptual y meditativo.



Pavese y la huidiza unidad de la vida

En El oficio de vivir, aparecen aforismos entremezclados con materiales muy diversos: anotaciones y reflexiones sobre sus lecturas, divagaciones diversas, confesiones íntimas, etc. A Pavese, el aforismo le permite plasmar, de un modo más o menos lapidario, sintético y apodíctico, ciertas evidencias que se le plantean en su incesante reflexión sobre su vida y sobre sí mismo. Temas como la juventud, la muerte, el matrimonio, el heroísmo o el fracaso se insertan en una vasta indagación del sentido de la existencia personal, la cual se le antoja como un reto a elucidarlo en términos de unidad, de coherencia profunda, incluso de "personaje". La decepción de no alcanzar esa unidad, parece ir empujándole hacia la puerta de salida, hacia la cual se había encaminado (no se sabe si de una forma totalmente inconsciente) a lo largo de toda su vida.


Felix Trull: memoria y aforismo

En su reseña sobre el libro Metas volantes, de Felix Trull, el poeta y aforista vasco Juan Manuel Uría destaca que el autor "nos entrega una foto -no fija- del ser, de su ser histórico vertical y horizontal (no podemos escapar de las coordenadas), un remedo de memorias donde reparte la panoplia de temas existenciales que nos son propios, iluminándonos por mor de su palabra inteligente, tal como el relámpago ilumina al caminante perdido que ve así, por fin, todavía muy lejos, pero allí al fondo, la puerta anhelada (e inalcanzable)".


Carlos Marzal: salvar al lobo

Carlos Marzal (Valencia, 1961) se licenció en filología hispánica por la Universidad de su ciudad natal. Considerado por muchos como el mejor poeta español vivo, es autor de varios poemarios y novelas. Como aforista, publica cada día un aforismo en las redes sociales. La arquitectura del aire (Tusquets, Barcelona, 2013) recogió una amplísima muestra de los mismos, organizada en varios bloques temáticos. El Aforista reproduce una pequeña selección de este libro, con la autorización expresa y por escrito del autor.


La duda sin complejos de Felipe Valle

Sobre un dolor mil veces reflexionado germinan los poemas, ensayos y narrativas de Felipe Valle Zubicaray. Pudiera parecer que su relación con los aforismos le revela como un chulo de certezas, pero lo cierto es que duda sin complejos. Borges diría de él que es inteligente porque duda. Quien suscribe añadiría que duda porque muere en cada palabra escrita. De sutil descaro se convierte en provocador de guillotina, donde primero se escribe lo que se siente y luego tal vez se lee lo que se piensa. Lo que son las cosas provoca en quien lo rastrea a golpe de clic ganas de más batalla. En este exótico diccionario, Felipe nos deja una vez más solos y a la intemperie para invitarnos a liderar el pensamiento propio estimulando el debate crítico y regenerador.


Vicente Verdú: seremos humo

Vicente Verdú (Elche, Alicante, 1942), sociólogo y periodista, ha utilizado las posibilidades de acceso universal que ofrecen Internet y sus redes sociales para escribir los aforismos que publicamos a continuación, en los que el reflejo del instante no está reñido con la reflexión moral, crítica, a veces dura, de la vida de nuestro tiempo, el vuelo poético, la crítica a los medios periodísticos, el apunte biográfico, político o el juicio estético. Presentamos un ramillete de aforismos que nos permiten pararnos a reflexionar en medio del camino de nuestra vida virtual, en la que este tipo de pensamientos en voz alta a todos accesible es de agradecer.


El aforismo español ante el siglo XXI

José Ramón González, el mayor experto español en el género del aforismo, analiza en este brillante texto la situación actual del género en nuestro país. En él, destaca que "en los últimos años el aforismo español se ha consolidado como pieza significativa en el sistema de géneros, alcanzando una visibilidad nada desdeñable en el campo literario y en el mundo editorial. Se trata de un auge aún precario, sin duda -especialmente si lo comparamos con géneros tradicionales bien arraigados-, pero ya de innegable entidad. Las cifras de libros publicados lo confirman fehacientemente".


Las misantropías de Benjamín Barajas

Benjamín Barajas (Michoacán, México, 1965) ha publicado los libros de creación Divagando en la voz [UAM-I, México, 1987]; Tadrio (Verdehalago, México, 1992); Empieza el aire [UAM-A/ Verdehalago, México, 1996]); Luz de la memoria [Ediciones del Lirio, México, 1988]; La gracia inmóvil [Ediciones del Lirio/ Tinta Nueva, México, 2002]; Mirada adversa [Tinta Nueva/ Unidad Cooperativa de Refrescos Pascual, México, 2002]; Escafandra [Universidad Autónoma de Puebla, México, 2004], Microensayos [Ediciones Tintanueva, México, 2004]; Pasión encerrada [Raíz del agua, México, 2007]; Poemas de agosto [Doble Sol, Buenos Aires, 2008]; La terquedad relampagueante [Ediciones Arlequín y Raíz del Agua, México, 2009]; Breves autopsias [Cuadrivio, México, 2013] y Jardín minado [Cuadrivio, México, 2015]. Los aforismos que reproducimos a continuación pertenecen al libro Misantropías, que ha publicado Libros al Albur en formato ebook.


Gracián: una brújula de bolsillo

Oráculo manual y arte de prudencia (1647) es una obra literaria perteneciente a la prosa didáctica de Baltasar Gracián en la que, a lo largo de trescientos aforismos comentados, se ofrece un conjunto de normas para triunfar en una sociedad compleja y en crisis, como lo era la del barroco, contemporánea a nuestro autor. Este “arte de prudencia” escrito por Gracián ha tenido vigencia en la actualidad, como lo demuestra el hecho de que se realizase una versión al inglés, titulada The Art of Worldly Wisdom: A Pocket Oracle,  presentado como un manual de autoayuda para ejecutivos. El Aforista publica una selección de los aforismos de esta brújula de bolsillo, perfectamente vigente para los tiempos que corren.


Hoffmansthal: el alto efecto del misterio

Hugo von Hofmannsthal (Viena, 1874-1929) fue un poeta, dramaturgo, narrador y ensayista austriaco que perteneció a una familia aristocrática de banqueros y recibió una excelente formación en su ciudad natal. Cosechó una temprana reputación con poemas líricos, aunque abandonó pronto la poesía para consagrarse al drama y a la ópera. Los aforismos que acogemos pertenecen a El libro de los amigos, publicado en traducción de Miguel Ángel Vega por la editorial Cátedra (Madrid, 1991), y muestran a un autor conocedor de la gran tradición aforística occidental, en la cual se inserta de manera brillante con sus frases densas de sentido, profundas y meditadas.


Jardiel Poncela: humorismo y desprecio

Desprecio, mucho desprecio rezuman los aforismos de Jardiel Poncela, quizá demasiado. Desde la atalaya de la lucidez, arremete sin pudor ni mesura contra todo y contra todos. Sólo se echan en falta alusiones, siquiera sutiles, a algunos temas que, actuales en su época, también lo eran antes y seguirían siéndolo después; por ejemplo, Dios y el diablo, la Iglesia o el Ejército. Sobre fuerzas tan poderosas (sobre todo, en la España de la que habla Jardiel), ni mú. Jardiel era valiente, pero no tanto; incluso se nos antoja, desde la distancia, bastante cobarde. Incluso mezquino...


Los poéticos adagios de Wallace Stevens 

Poeta tardío y pausado como pocos, el norteamericano Wallace Stevens (1879-1955) sigue siendo uno de los grandes referentes de la modernidad poética. Acerca de su propia vida, dejó escrito: "Evíteme, por favor, contar los datos biográficos. Soy abogado y vivo en Hartford. Estos hechos no son divertidos ni reveladores". Al menos desde los años treinta, Stevens fue llenando de notas varios cuadernos, con o sin título. A menudo anotaba frases o dichos de otros que le habían llamado la atención leyendo, y a veces también sus propias reflexiones a las que tituló habitualmente, en latín, Adagia. Los aforismos de Stevens fueron publicados en 1957, dos años después de fallecer.

Las Trizas de Franklin Fernández

Franklin Fernández (Caracas, Venezuela, 1973). Promotor cultural, egresado del Taller de Poesía del Celarg (1999). Licenciado en Artes Plásticas (2003) por el Instituto Universitario de Estudios Superiores de Artes Plásticas Armando Reverón (actualmente Uneartes, Universidad Nacional Experimental de las Artes), en Caracas. Su trabajo plástico y literario ha sido publicado en diversos diarios y revistas de su país. Ha publicado los libros Poemas-objeto: cuerpo y textura de la poesía (2015), La Escritura y tú (2010), La Imagen Doble (2006), Simples (2006)  y Breves (2000). Los textos que presentamos pertenecen a Trizas. Aforismos 1998-2015, libro que recopila una amplia antología de sus creaciones más breves, que acaba de publicar Libros al Albur en formato ebook (Sevilla, 2015).

Las deducciones gustosas de Juan Ramón

A pesar de ser universalmente conocido y reconocido como poeta, Juan Ramón Jiménez simultaneó su escritura en verso y su crítica literaria con el cultivo continuado del género aforístico. Según los últimos cálculos, el número de aforismos que escribió supera con creces los cuatro mil, los cuales abordan todo tipo de asuntos, aunque se decantan sobre todo (como, por otro lado, su propio obra en verso) por la temática ética, poética y metapoética. El Aforista selecciona un breve puñado de los aforismos de Juan Ramón Jiménez, con la intención de animar al lector interesado a adentrarse en esta amplia, y no muy conocida, parcela creativa del poeta andaluz.

Jordi Doce: escribiendo lo imprevisto

Jordi Doce (Gijón, 1967) es poeta, crítico y traductor. Doctor en letras por la Universidad inglesa de Sheffield. Ha sido lector de español (1997-2000) en la Universidad de Oxford y anteriormente en la propia Universidad de Sheffield (1993-1995). Además de traducir la poesía de W. Blake, T. S. Eliot, Ted Hughes, Charles Simic y Charles Tomlinson, es autor de los poemarios Lección de permanencia (Pre-Textos, 2000), Otras lunas (XXVIII Premio de Poesía Ciudad de Burgos; DVD, 2002) y Gran angular (DVD, 2005). En prosa ha publicado Hormigas blancas (Bartleby, 2005), Imán y desafío (V Premio de Ensayo Casa de América; Península, 2005), Curvas de nivel y Perros en la Playa (La Oficina, 2011), libro del cual El Aforista publica un puñado de aforismos con la autorización del autor.

Joseph Joubert: un espíritu ligero

Joubert no publicó nada en vida, pero escribió muchos cuadernos sobre la naturaleza del ser humano y la literatura, los cuales no se publicaron hasta varios años después de su muerte. El Aforista ofrece una amplia selección de los pensamientos de Joubert, en los cuales pueden detectarse sus muchas virtudes: una expresión clara y honesta; un espíritu sensible y bueno; una mirada amplia y profunda; y una auténtica vocación moral que le indujo a observarse a sí mismo y a sus contemporáneos en la certeza de que nada humano nos es ajeno... a condición de que lo observemos desde la debida distancia.


Las tóxicas gotas de Sergio Golwarz

Pocos pensadores contemporáneos podrían ostentar el título de “renacentistas” al estilo de Sergio Golwarz. Escritor, filósofo, músico e inventor; visitó los géneros literarios del cuento, la novela, el teatro y el aforismo e incursionó en la crítica fílmica y literaria, así como en la reflexión filosófica de temas como el humor, el arte o el lenguaje. Gotas tóxicas reúne aforismos y minificciones publicados por el autor en libros, diarios y revistas literarias entre 1956 y 1969, y acaba de ser publicado como ebook por la editorial mexicana Cuadrivio. El Aforista publica una breve selección de las mismas, con la autorización expresa del compilador.

Elias Canetti: más allá del aforismo

A pesar de haber cultivado la novela, el ensayo y el teatro, a Elias Canetti se le conoce y reconoce sobre todo por su autobiografía y sus libros de apuntes (La provincia del hombre, El corazón secreto del reloj, El suplicio de las moscas, Hampstead). Y decimos apuntes, y no aforismos, porque en puridad nos encontramos ante un género que trasciende -por sustracción extrema- el género más breve hasta alcanzar el umbral mismo del silencio, coqueteando con él, seduciéndolo. El Aforista presenta una selección de apuntes sobre el apunte del autor más lacónico.

Carlos E. de Ory, el taquígrafo del éter

Poeta ígneo, creador impulsivo y propulsivo, mente preclara, espíritu volcánico y ascensional, Carlos Edmundo de Ory fue un autor especialmente dotado para la escritura incisiva, para los lúcidos trallazos erupcionales. Aunque cultivó los géneros clásicos con destreza (he ahí su libro de sonetos para atestiguarlo), se lució en los más dúctiles, como el aforismo y el diario. El Aforista selecciona un puñado de apuntes de sus cuadernos, publicados en tres tomos por la Diputación de Cádiz.


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